Consejos para rutas de senderismo en época de calor

¡Amigo aventurero, aventurera!

El senderismo es una actividad maravillosa que nos permite conectarnos con la naturaleza, explorar paisajes impresionantes y mantenernos activos. Sin embargo, cuando el calor del verano aprieta, es importante tomar precauciones adicionales para garantizar nuestra seguridad y comodidad durante las rutas de senderismo.

Cuando mires la previsión del tiempo antes de tu próxima escapada, quiero compartirte algo crucial: no te dejes engañar por las cifras. Sí, esas temperaturas que ves son a la sombra, pero bajo el sol, ¡la cosa es otra historia!

En este post, compartiremos consejos útiles y prácticos para disfrutar de tus caminatas incluso en las condiciones más calurosas. Desde preparación personal hasta elección de materiales y cuidado en caso de golpes de calor, aquí encontrarás información esencial para mantener tu bienestar mientras exploras senderos bajo el sol.

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Vamos a ello.

Consejos para andar con calor

Imagina que te dice tu amigo el hombre del tiempo que la temperatura máxima será agradable, en torno a los 29 o 30 grados en la montaña. Parece perfecto, ¿verdad? Sin embargo, aquí viene la sorpresa: cuando el sol se encuentra en su punto más alto, durante las horas del mediodía, esos números pueden elevarse sin piedad, superando los 33 ºC. El sol parece estar jugando al escondite con nosotros.

Pero atención, si la previsión habla de temperaturas cercanas o por encima de los 33 ºC, es momento de prepararse. Cuando estés allá afuera, esa temperatura puede dispararse hasta los 35 ºC. ¡Así es, en serio! Te encontrarás como un asado en el horno, y esto definitivamente no es ideal para nuestra salud mientras intentamos conquistar senderos empinados.

Es esencial estar alerta y tomar medidas para protegerte del calor extremo. Si la temperatura supera los 30 ºC, es necesario extremar las precauciones, pero si alcanza los 35 ºC, lo más sabio es cambiar los planes y disfrutar del día en un lugar fresco, como sumergirse en el agua. Esta situación representa un riesgo extremo que no debemos subestimar.

Además, no olvides tener en cuenta los ambientes húmedos. La alta humedad puede hacer que transpires más, y si el sudor permanece líquido en lugar de evaporarse, aumenta el riesgo de sufrir un golpe de calor.

Tanto en montañas como en lugares con altos niveles de humedad, es esencial estar atentos a las señales que nos da nuestro cuerpo y tomar medidas para mantenernos frescos y seguros en todas nuestras aventuras al aire libre.

Hidrátate adecuadamente

Beber suficiente agua es fundamental para mantenerte hidratado. Lleva contigo una botella de agua y bebe regularmente, incluso si no tienes sed. Considera también llevar una bebida deportiva para reponer los electrolitos perdidos.

Pero ¡ojo! No te excedas en cada sorbo, limita tu ingesta a pequeñas cantidades.

Y he aquí una gema de sabiduría: si tienes la suerte de encontrar una fuente de alta montaña con agua fresca, ¡no te lances a beberla de golpe! Primero, pruébala en tu boca para precalentarla un poco antes de tragarla.

Es tentador querer saciar la sed con un litro entero de agua helada cuando hace calor extremo, pero eso puede resultar en un desastre. Beber en exceso y demasiado rápido puede tener consecuencias nada agradables.

Mantén tu hidratación en orden, pero hazlo con prudencia y moderación.

Elige el momento adecuado

Evita caminar durante las horas más calurosas del día. Opta por realizar tus rutas temprano por la mañana o al final de la tarde.

¡Madrugar es la clave! En lugar de salir por la tarde, levántate temprano y comienza tu aventura al amanecer. ¡Te aseguro que valdrá la pena!

Por la mañana, las temperaturas serán más frescas y agradables, lo que hará que tus exploraciones sean mucho más placenteras. Además, tendrás la ventaja de encontrarte con menos gente en los aparcamientos y senderos. ¡Es como tener el paraíso montañoso solo para ti!

Pero eso no es todo, no, no… Al madrugar, tendrás más horas de luz a tu disposición. Así, si surgen imprevistos o decides extender tus actividades, ¡tendrás todo el tiempo necesario para hacerlo!

Disfruta de la magia del amanecer.

Viste ropa adecuada

Opta por ropa ligera y transpirable.

La clave para disfrutar al máximo de tus aventuras es sentirte cómodo y libre de movimientos.

Las prendas gruesas pueden resultar pesadas y limitar tus movimientos, lo que no es ideal cuando estás explorando terrenos emocionantes.

Puedes utilizar prendas de manga larga y pantalones para protegerte del sol y evitar quemaduras. Pero tienes que valer para ponerte ese tipo de ropa con calor. Es lo mejor. Pero al menos yo no lo hago, es superior a mí.

Del mismo modo, las prendas ceñidas pueden restringir tu libertad y convertirse en una molestia durante tus actividades. A menos que sean elásticas y te brinden flexibilidad, ¡es mejor evitarlas!

Elige rutas donde no falte la sombra

Material para rutas con calor

Además de tomar precauciones personales, el equipo adecuado también juega un papel crucial en tu comodidad y seguridad durante el senderismo en condiciones de calor. Aquí tienes algunas recomendaciones sobre el material que debes considerar:

Calzado apropiado

Elige zapatos de senderismo transpirables y ligeros que te brinden buena sujeción y tracción. Asegúrate de que estén cómodos y que hayas probado previamente para evitar rozaduras y ampollas.

Protector solar

Aplica un protector solar de amplio espectro con un factor de protección solar (FPS) adecuado. Vuelve a aplicarlo cada pocas horas y presta especial atención a las áreas expuestas, como la cara, el cuello y los brazos.

Mochila y equipo

Opta por una mochila ligera y bien ventilada para llevar tus pertenencias.

Cuando te aventuras en salidas al aire libre, hay ciertos elementos que no deben faltar en tu lista:

1. Protección Solar: No subestimes el poder del sol. Asegúrate de aplicar protector solar adecuado antes de salir y lleva contigo más para reforzar la protección durante el día.
2. Gorra de Protección: Una gorra es un compañero imprescindible. Opta por una que cubra tu cuello para brindar una defensa adicional contra los rayos solares.
3. Hidratación Constante: El agua es tu mejor amiga en días cálidos. Asegúrate de llevar al menos 2 litros de agua, especialmente si planeas una salida de media jornada. Mantén en cuenta que las fuentes pueden estar secas en verano, así que abastece tus reservas adecuadamente.
4. Alimentos Nutritivos: Llevar alimentos ricos en sales minerales es vital. Cuando sudas, pierdes estas sales esenciales que deben reponerse. Frutas, frutos secos y alimentos energéticos son excelentes opciones.
5. Ropa Inteligente: La elección de tu ropa es clave. Opta por prendas de color claro, ligeras y un poco holgadas. Esto permite que el sudor se evapore y que tu cuerpo esté bien ventilado, manteniéndote fresco y cómodo durante tu jornada al aire libre.

Incluye un protector labial con FPS y un kit básico de primeros auxilios que incluya apósitos y cremas para quemaduras solares.

Qué hacer ante un golpe de calor

Si experimentas síntomas como mareos, dolor de cabeza intenso, náuseas, piel enrojecida o caliente, busca de inmediato un lugar fresco y sombreado. Si es posible, siéntate o recuéstate para descansar y permitir que tu cuerpo se enfríe.

Hidrátate y refresca tu cuerpo

Bebe agua fresca en pequeños sorbos para rehidratarte. Puedes mojarte la cara, el cuello y las muñecas con agua fría o utilizar una toalla húmeda para refrescarte. Evita el consumo de alcohol y cafeína, ya que pueden empeorar la deshidratación.

Ventila tu ropa

Si es posible, retira capas de ropa para permitir que el calor se disipe más fácilmente. Si tienes una prenda mojada, colócala en la parte posterior de tu cuello o en tu frente para ayudar a reducir la temperatura corporal.

Busca ayuda médica

Si los síntomas empeoran o persisten, busca atención médica de inmediato. Un golpe de calor puede ser peligroso y requerir tratamiento médico.

Calor en la montaña

El senderismo en la montaña durante el calor presenta desafíos adicionales debido a la altitud y la exposición al sol. Aquí hay algunos consejos adicionales para tener en cuenta:

Planifica tu ruta con anticipación

Investiga la altitud y el terreno de la montaña en la que planeas hacer senderismo. Ten en cuenta que las temperaturas pueden variar considerablemente a medida que subes, y el sol puede ser más fuerte a mayor altitud.

Primero, asegúrate de conocer la altitud de la zona por donde se desarrollará nuestra épica actividad. Si hay zonas arboladas para descansar al mediodía, ¡es como encontrar un oasis en medio del desierto! Un buen descanso bajo la sombra nos dará energías para seguir adelante.

Otro punto crucial: ¡averigua dónde encontrar fuentes de agua durante el camino! Saber dónde rellenar nuestras botellas nos garantizará una hidratación impecable en nuestro periplo.

Y hablando de hidratación, ¡no escatimemos en agua! Asegúrate de llevar en tu mochila al menos 1,5 litros por persona, y si acasouna botellita más de 0,50 litros que lleves a mano para beber regularmente. Es como llevar un manantial portátil que nos mantendrá frescos y listos para cualquier desafío.

Otra opcion es cargar con CamelBak que lleva el agua incorporado en la parte de atrás, y podrás tener siempre la hidratación a mano, o mejor dicho, cerca de tu boca.

A veces, somos perezosos y dejamos de beber de manera más habitual por no parar.

Evita la montaña de altitud baja

Cuando el pronóstico anuncie temperaturas altas, es mejor evitar la baja y media montaña al mediodía.

¿Por qué?

Porque el sol estará decidido a demostrar su poder, y no queremos que nos tome por sorpresa.

La solución.

En las horas que abarcan el mediodía, encuentra una sombra acogedora y tómate un tiempo para comer, descansar o incluso echarte una siesta. Sí, sí, ¡has oído bien! La siesta, esa maravillosa tradición que algunos critican, en realidad es parte natural del ciclo de sueño humano.

Así que, cuando el sol esté más fuerte y las temperaturas suban, tomemos un merecido respiro bajo la sombra y permitamos que nuestros cuerpos y mentes recarguen energías. ¡Es la manera perfecta de disfrutar al máximo nuestras aventuras sin sucumbir al ardor del sol!

Busca mayores altitudes

Tengo un gran consejo que seguramente pueda sorprenderte.

En olas de calor es mejor permanecer en altitudes altas, rondando los 2.000 metros que en baja montaña.

Pero no te olvides que incluso a esa altura, al mediodía, puede hacer calor intenso, ¡o todo lo contrario si el viento decide unirse a la fiesta! Eso sí, nunca te olvides de ponerte crema solar, porque el viento puede engañar.

Es como lidiar con dos personalidades distintas, pero te aseguro que vas a estar mejor que en monte bajo.

Ropa clara.

Olvídate del negro tan habitual en tus prendas.

Yo soy uno de esos, y me cuesta librarme de mi negro.

Pero se aconseja optar por colores más claros y frescos. ¡Tu cuerpo te lo agradecerá y te mantendrá más cómodo!

Protégete del sol y del viento

Usa protector solar de alta calidad con un alto FPS y aplica regularmente.

Considera llevar un pañuelo para proteger tu cara y cuello del sol y del viento.

Además, utiliza gafas de sol con protección UV para evitar daños oculares.

Además, no escatimes en llevar una gorra contigo todo el tiempo. Incluso en días frescos con temperaturas suaves y un sol radiante, es esencial proteger tu cabeza del ardiente sol.

¡La insolación puede acechar incluso en esos días aparentemente agradables!

Y apunta.

Si el calor se vuelve intenso, empapa tu gorra en las fuentes cercanas. ¡Ya verás qué alivio! Y cómo el frescor te envuelve y te permite seguir disfrutando de tus aventuras sin dejar que el calor te detenga.

Ajusta tu ritmo

El calor puede afectar tu rendimiento físico, por lo que es importante adaptar tu ritmo de caminata. Reduce la velocidad y toma descansos regulares para permitir que tu cuerpo se recupere del calor. Escucha a tu cuerpo y no te exijas más de lo necesario.

No te confíes con el frío de la mañana

A pesar de que las mañanas en la montaña pueden ser frescas, el calor puede aumentar rápidamente a medida que avanza el día. Asegúrate de llevar capas adicionales de ropa para ajustarte a las variaciones de temperatura.

Monta tu refugio

En los casos de altas temperaturas, es mejor quedarse quieto en los momentos más calurosos.

Otra opción es montar una especie de sombrilla improvisada. Con una manta térmica puedes ajustarla entre los medios que nos aporta la naturaleza, o en todo caso, con unos bastones de senderismo.

Así tendremos una una sombra provisional.

En Pleno Recorrido

Cuidados Indispensables

Cuando estás en plena marcha, asegúrate de seguir estos cuidados indispensables para mantenerte en óptimas condiciones:

1. Protección Solar Inteligente: Enfrenta la radiación solar con inteligencia. Utiliza crema protectora y asegúrate de cubrir bien tu cabeza, cuello y rostro, que son las áreas más sensibles a las temperaturas elevadas.
2. Hidratación Continua: Mantén tu cuerpo hidratado constantemente, incluso si no sientes sed. Beber agua es esencial para mantenerte en forma durante la caminata. Además, recuerda reponer las sales minerales que se pierden al sudar.
3. Refresca y Revitaliza: A medida que avanzas, procura refrescarte de manera periódica. Puedes rociar agua sobre tu piel o pulverizarla suavemente. También, aprovecha para abanicarte de vez en cuando y mantener la sensación de frescura.

Recuerda que cuidarte durante la marcha es fundamental para disfrutar de tu aventura de manera segura y confortable. Protégete del sol, mantente hidratado y refresca tu cuerpo para aprovechar al máximo cada momento en la naturaleza.

Lo que tienes que evitar

Toma en consideración estas precauciones en plena marcha:

1. Elección de Bebidas: Opta por evitar bebidas con azúcares, cafeína o alcohol. Estas sustancias pueden contribuir a la deshidratación y afectar tu equilibrio.
2. Beber con cabeza: Si bien es importante mantenerse hidratado, evita beber agua extremadamente fría y de manera muy rápida. Un consumo excesivo puede tener efectos contraproducentes en tu organismo.
3. Entra al agua con cautela: Al lanzarte al agua, hazlo con precaución. Evita un shock térmico ingresando poco a poco, especialmente si la temperatura del agua difiere significativamente de la ambiental.
4. Proteger la piel. Evita exponer tu piel directamente a la radiación solar al ir sin camiseta, en bikini, etc. Utilizar ropa que cubra tu piel es clave para protegerte de los rayos ultravioleta.
5. Ropa mojada: Si bien la hidratación es vital, empapar tu ropa en exceso para refrescarte mientras sigues en marcha puede no ser una buena idea. La ropa empapada puede obstruir la ventilación y afectar tu comodidad

Hay más cosas a evitar, pero suele ser más la lógica y la cabeza quienes se encargan de evitarlas.

Disfruta con seguridad

Finalmente, recuerda siempre notificar a alguien de confianza sobre tu ruta de senderismo y tu hora estimada de regreso. Lleva contigo un teléfono móvil con batería suficiente para emergencias y una lista de contactos de emergencia.

En conclusión, con la preparación adecuada y siguiendo estos consejos, podrás disfrutar de tus rutas de senderismo incluso en condiciones de calor. Recuerda siempre priorizar tu salud y seguridad, y no dudes en modificar tus planes si las condiciones climáticas se vuelven demasiado extremas. ¡Prepárate para disfrutar de la naturaleza y aventurarte en las montañas de manera segura y responsable

Profacio

Recuerda que el calor afecta tu rendimiento.

Así que, querido compañero, la próxima vez que mires la previsión, ten en cuenta la travesura del sol. Protégete, hidrátate y disfruta de tus aventuras con seguridad y bienestar.

¡No dejes que el sol te juegue una mala pasada!

Esto es todo. Feliz día.

Fernando Camacho

IG: @fer_alma_aventurera

©️Imágenes propiedad de @fernandocamacho®️

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